El Hombre Invisible, 1930
El horizonte lo sitúa en la parte superior y además es poco claro, ya que ubica el instante en un atardecer, lo que hace que el color del cielo no sea el azul de otros lienzos. El simbolismo radica en el deseo de no ser visto y ver todo. La figura del hombre invisible está compuesta por elementos en distintos planos que hacen necesario un esfuerzo de nosotros para ver el conjunto completo, o bien un elemento concreto.